Tarde pero seguro.

La verdad, me es difícil organizar mis ideas y empezar a escribir esto, porque estoy por cumplir dos meses fuera de casa, pero nunca es tarde para empezar, así que vamos . Antes de emprender este viaje, mis abuelos me visitaron, los extraño, siempre me ha gustado su presencia, cuando estoy con ellos sea donde sea me siento como en casa. Mi Tata me pidió que no olvidara nada, que seria buena idea que escribiera todo, "de tantas cosas que vivirás, que verás y aprenderás, seguro que se te olvidaran algunos detalles importantes" me dijo, y yo pienso que tiene razón, y en el fondo me da miedo olvidar las cosas, olvidar lo que sentí y definitivamente esta experiencia quiero que quede plasmada en algún lugar, para siempre poder leer y vivirlo de nuevo. 

Siempre había querido viajar, volar en aviones, conocer nuevos lugares y muchas personas. Empecé a planear esto desde que entre a la universidad, no puedo decir que al principio creía que no se iba a poder, la verdad es que siempre tuve fe, había días malos más en el fondo siempre supe que se podría, y no puedo decir que era algo que diario le pedía a Dios, pero definitivamente era una petición constante en mis oraciones. Todas las cosas, desde la aplicación para ser candidata del intercambio, hasta los documentos y boletos de avión necesarios para viajar, de una u otra forma se facilitaron, aun cuando no teníamos nada (hablando económicamente). No había duda de que Dios estaba con nosotros. Casi todos los documentos y tramites fueron muy tardados lo cual era terrible para mi, y mi falta de paciencia.  

Una semana antes de irme, mi mama se enfermo y estuvo mal, no había dinero y yo aun necesitaba muchas cosas para irme, en ese momento se me junto todo, y hasta me sentí un poco egoísta de que el dinero que había tenían que ocuparlo en mi, que ya estaba con un pie afuera, y no en mi mama. Como siempre las cosas salieron adelante y aunque me hubiera gustado estar con toda mi familia el día 8 de Septiembre del 2013 mi papa y yo nos fuimos en camión al aeropuerto. Mi vuelo salia hasta las 6:00 pm y llegamos al aeropuerto como a las 9:00 am, tuvimos que tomar ese camión muy temprano ya que en el camión que salia después no nos daría tiempo de llegar al aeropuerto a las 3:00 pm para documentar. No me importo, pasar todas esas horas esperando, estar con mi papa fue muy bonito, es el mejor, lo amo como una loca y estoy orgullosa de él. 

Para ser sincera yo nunca tuve miedo, nunca sentí nervios, realmente no sabia a lo que me aventuraba, todos me preguntaban, que si no tenia miedo de irme sola, de extrañar a mi familia, a mis amigos o mi casa, pero yo nunca me puse a meditar en eso, estaba enfocada en lograrlo. Ese día llego la hora de entrar a la sala de espera, lugar al que mi papa ya no podía entrar conmigo, me despedí de él tratando de que no fuera algo tan emotivo (no quería llorar, me choca llorar) aunque era difícil ignorar sus ojos llenos de lagrimas, le dí un abrazo y me dijo: "me voy a esperar aquí afuera hasta que te vayas por si necesitas algo", ahora que estoy recordando y escribiendo esto, no puedo creer que no lloré al despedirme de él tal vez "aun no me caía el veinte" , mi papito siempre ha sido el mejor, y estoy segura que él estuvo ahí hasta que me fui. Cuando anunciaron que tenia que pasar al área de abordaje seguía "tranquila" pero cuando entre al avión todas las preguntas que me habían hecho las personas de si no tenia miedo, si iba a extrañar a mi familia, que iba a sentir de vivir sola, de hacer un viaje tan largo sin mis papas, me vinieron a la mente, "me voy ahora y vuelvo dentro de UN AÑO" pensé,  tuve miedo y me puse tan nerviosa que sentía como mi cuerpo temblaba, aunque trate de aparentar que estaba normal, no podía ponerme a llorar como una niña enfrente de tanta gente. Me senté justo a lado de "la ventanita del avión", abroche mi cinturón y trataba de imitar lo que los demás pasajeros hacían, tenía de aparentar que ya había hecho un viaje así antes.
A mi lado se sentó un señor que parecía asiático, no recuerdo su nombre pero era del norte de México y hablaba como norteño, era muy amable y mientras despegaba el avión recuero que le dije: "tengo miedo" y el muy tranquilo me contesto: "no te preocupes, estos aviones son unos animalones, no los mueve nada, estaremos bien"  y justo en ese momento el piloto desde la cabina anuncio que seria un despegue "algo agitado y con turbulencias" el señor solo me volteo a ver y dijo : "caramba, estos solo me hacen quedar mal contigo, pero tranquila llegaremos bien", jajajaja el señor platico que era neurólogo y que viajaba a Europa para una capacitación, me enseño fotos de sus hijos y me platico un poco de su vida, ya sé que no tengo que confiar en extraños, pero platicar con el me hacia sentir tranquila. 

Fue un vuelo muy largo 10:30 horas, hasta llegar a Madrid, España. Cuando finalmente llegamos, baje a buscar mis maletas, que por cierto eran como lo doble de pesadas que yo, me era MUY difícil cargarlas y moverlas, pero finalmente las encontré, luego tuve que pasar por donde te revisan tu pasaporte y me fue muy bien, no me dijeron nada. Después camine con todas mis cosas hacia la salida, en donde yo no estaba segura si estaría alguien esperando por mi, en fin cuando salí no me costo mucho trabajo encontrar a Daniel que SI me estaba esperando, a pensar de que ni nos conocíamos y yo había tenido un retraso en mi hora de llegada.

Me ayudo con todas mis maletas y nos fuimos directo a su casa. Fue extraño llegar a casa de alguien a quien nunca había visto, pero muy a mi favor, él fue muy amable y hospitalario. Ese día no hicimos mucho, salimos por algo de comer y platicamos. Así fue como comenzó esto, el inicio de esta gran experiencia. 

Quiero decir, que DIOS es GRANDE, que es completamente amoroso y perfecto, que dependo completamente de EL y que en cada paso que doy, puedo ver como me sostiene y como me tiene en la palma de SU mano. LO AMO y puedo decir que es EL MEJOR COMPAÑERO DE VIAJE, EL MEJOR COMPAÑERO PARA VIVIR. 

Gracias Dios.